Artá, mayo 2013
Cae la tarde y amanece en París en el día en que todo ocurrió, decía la canción de La Unión. Sin embargo aquí no ocurría nada. Nosotros esperabamos la apertura de la exposición del libro “Las tiendas desmontadas o el mundo desconocido de las percepciones”, escrito por el fotógrafo y escritor ciego Evgen Bavcar, con grabados de Miquel Barceló. Y mientras esperábamos la oscuridad caía sobre nosotros y el pueblo iba agonizando al ritmo de una música de cámara que salía del edificio de enfrente que hacía las veces de conservatorio local. Y la única conclusión que he podido sacar de todo ello es que la Fotografía no registra el frío que llegaba pegado a la oscuridad y tampoco la melancolía de un chelo y un piano tras un muro.
1 comentario:
No obstante, la fotografía destila sugerencias por todos los rincones. Un placer.
Publicar un comentario