Barcelona, octubre 2014
Una vez fuí al médico de la empresa a consultarle sobre los dolores de cabeza y su relación con la vista cansada y las pantallas del ordenador. Me puso delante de un panel de letras del que no se molestó ni en encender la luz trasera y me dijo ¿hasta dónde puedes leer? y cuando llegué a mi límite me preguntó ¿cuántos años tienes?, treinta y cinco, le contesté. "Pues de ahora en adelante lo verás cada vez peor"...
No hay comentarios:
Publicar un comentario