Nazaré, Portugal, julio 2011
Tradiciones. Cada año la misma parodia. Que si acarrear con los aperos, que si rastrillar la arena, que si amontonarla para hacer una almohada, que si llegar disfrazados de exploradores o de mataharis, que si cambiarse de la forma más aparatosa posible, que si embadurnarse de ungüentos diversos, que si jugar a las palas, que si palear... Luego vendrán las fiestas patronales y los fuegos artificiales. Como si no hubiera habido bastante artificio ya.
Ahora comprendo lo que significa veranear. Algo así como largarse a donde no te conozcan para hacer el ridículo a tus anchas. Cada vez más anchas.
4 comentarios:
Te veo inspirado.
Sólo estoy haciendo ejercicios para dilatar el estómago para la visita a Chipiona... Con escala en Utrera, of course.
Cuando vienes por aquí?
En septiembre, espero... Pero ahora estoy lejos.
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