
Sobremesa, una ligera tripada, comida con vino, solecito, somnolencia, documental de la dos (de los que todos hablan y nadie ve)... Ver trabajar a un maestro de la caza furtiva, aunque sea urbana y callejera, es toda una experiencia. Merodea, se acerca a la pieza, la valora. Lo que otros hubieran desechado despierta su atención. Seguramente no valdrá gran cosa, pero por si acaso... Y en esto aparece Baylón y zás, le hace una foto. ¿Como se titula la película? Guirigato!
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